Moda? Terapia? Técnica? Capacidad? Habilidad? En los múltiples foros en los que me he documentado y leído sobre el Mindfulness, existe una gran cantidad de definiciones diversas que tratan de explicar en qué consiste exactamente, cuáles son sus beneficios, cómo realizarla a diario y en qué se diferencia de la meditación.
“No hay nada que pueda darse por sentado en la aventura del proceso de crecimiento”
(Eline Snel)
En este artículo voy a contar en qué consiste el Mindfulness, diferenciándolo de otras disciplinas y técnicas, qué beneficios concretos aporta cuando nos dedicamos a enseñar y educar a jóvenes adolescentes dentro de los grandes cambios que se gestan en esta trepidante etapa de la vida, y también compartiré varios ejercicios muy prácticos que se pueden aplicar cuando uno lo decida con total sencillez y utilidad.
Por otro lado, contaré mi propia experiencia con el Mindfulness, qué fue lo que más me costó en mi primer contacto, qué descubrí y que nunca antes me había dado cuenta (os contaré mi experiencia de mindful-eating con una pasa en un auditorio lleno de gente justo antes de la hora de comer; y el ejercicio de mindfulness caminando todo lo despacio que pude sintiendo cada parte del pie) y qué beneficios he logrado a la hora de aplicarlo en la educación con mis hijos.
Además, os traigo en este post la entrevista que realicé a la gran profesional y excelente persona y amiga Ana Costa, psicóloga positiva experta en Mindfulness, en la que hemos pretendido acercaros de una manera amena, humana y divertida, cómo aplicar el Mindfulness a tu día a día, sobre todo en esta época, a la hora de retomar la rutina después del verano. Siendo válido tanto para padres y madres, como para sus hijos adolescentes. Que a todos nos cuesta volver a coger ritmo.
QUÉ ES MINDFULNESS.
El Mindfulness se entiende como la capacidad que todos tenemos de tener conciencia plena del momento presente. La vida, cada día, está repleta de momentos. Normalmente recordamos sólo algunos de ellos, mientras que otros pasan totalmente desapercibidos por nuestra consciencia. Vivimos en una inercia que nos hace pasar por la vida sin enterarnos de lo que nos pasa y nos rodea. Hasta que es demasiado tarde, a veces.
La palabra Mindfulness es una palabra inglesa que se ha traducido como atención plena o atención consciente. En origen proviene de la palabra “sati” en pali, idioma parecido al sánscrito utilizado en la época de Buda (hace unos 2500 años). Sati es el nombre del verbo “sarati” cuyo significado es “rememorar o recordar”.
QUÉ NO ES MINDFULNESS.
En la práctica del Mindfulness es preciso poner toda la atención posible en el foco y concentración a través de la meditación. Sin embargo, meditar no significa estar ya en un estado de presencia plena o Mindfulness. En definitiva, Mindfulness no es:
- Dejar la mente en blanco o una técnica de relajación.
- Entrar en trance.
- Repetir mentalmente frases positivas.
- Una manera de huir de la realidad y las rutinas diarias.
REFERENCIAS.
- Una de las figuras de mayor relevancia dentro del mundo del mindfulness y que fue quien acercó el conocimiento y práctica de esta actividad desde oriente a occidente, es Jon Kabat-Zinn, biólogo molecular, médico, escritor y profesor universitario en Estados Unidos, creador de la técnica de Reducción del Estrés Basada en la Atención Plena. Desde 1979 se enfocó en la relación mente-cuerpo y su influencia en la salud, lo que le llevó a buscar aplicaciones clínicas para entrenar en meditación de atención plena (mindfulness meditation)
Aquí podéis encontrar la definición que Jon Kabat-Zinn hace del Mindfulness: https://www.youtube.com/watch?v=ybgH4WQH9_k
- Otra referencia del Mindfulness es Rob Nairn, quien a partir del budismo exporta el mindfulness de oriente y lo acomoda para que los occidentales lo pudiésemos comprender de una manera más cercana a partir de unas pautas muy básicas e inspirado en la compasión. Un libro destacado de este autor es “Diamond Mind. A psychology of meditation”
- Otra rama que nació del Mindfulness fue a través de Zindel Segal, terapeuta, que creó otra base conocida como Terapia Cognitiva basada en Mindfulness. Éste es su enlace en inglés: http://www.mbct.com/
Como hemos dicho anteriormente, el Mindfulness es una capacidad con la que nacemos, la tenemos todos, y como capacidad que es, la podemos trabajar para reforzarla. Tan sólo requiere práctica hasta llegar a convertirla en un saludable hábito en nuestra vida.
BENEFICIOS DEL MINDFULNESS.
¿Qué beneficios nos aporta la práctica del Mindfulness? Pues entre otros, encontramos:
- Aceptarse más a uno mismo
- Mayor equilibrio emocional
- Menos juicios
- Más capacidad para dejar la reactividad emocional
- Dejar de identificarse con pensamientos
- Más calma y tranquilidad
- Conectar más y mejor con los demás y nuestro entorno
- Mayor comprensión y compasión
- Más capacidad de gestionar nuestros pensamientos, emociones, lenguaje y acciones
- Fortalece el sistema inmunitario.
- Reducción del estrés.
- Incremento de la energía vital.
- Mayor control y gestión ante hábitos poco saludables.
“Cuando nuestra mente está en calma, nuestra psique está en armonía con la estructura del universo“.
(Carl Jung)
UNA ANÉCDOTA PERSONAL. MI EXPERIENCIA CON EL MINDFULNESS.
Hace unos 7 años estaba esperando a mi segundo hijo, cuando quise probar unos ejercicios de relajación acompañados de música zen, de la que se puede escuchar gratis en YouTube. Yo me encontraba en una época de mucho estrés, ansiedad y nervios. Me habían despedido del trabajo el año anterior, se me acaba el paro y veía muchos problemas derivados de la falta de ingresos en casa, y con una niña de dos añitos ya pululando a mi alrededor. Me sirvió bastante practicar aquellos ejercicios. Pero no lo mantuve como rutina.
En el 2016 estaba recibiendo mi formación de Coaching y me apunté a un taller de varios días de Mindfulness. Iba alrededor de una hora semanal durante 4 semanas. Una de las cosas de las que me di cuenta es de lo cansada que estaba. Yo ya sabía que andaba agotada, pero no tanto, porque cada vez que nos pedían sentarnos o tumbarnos, poniéndonos cómodos, ¡¡me quedaba dormida enseguida!! Una cosa es relajarse, otra es quedarse dormida, ¡jejeje!
Otro ejercicio que realizamos fue caminar descalzos y todo lo despacio de lo que éramos capaces (cosa que fue bastante difícil, porque la gran mayoría de nosotros vamos corriendo cuando vamos por la calle), recorriendo toda la sala y de un modo aleatorio, por lo que a veces parecía que nos íbamos a chocar los unos con los otros. El empezar a sentir mi planta del pie, procurando poner toda mi atención en cada parte de mi talón, mis dedos, el arco, tobillo, etc., me costó mucho. Pero lo hice.
Semanas después asistí a otro taller de mindful-eating. Me sonó curioso y quería saber en qué consistía. Coincidió justo la hora antes de comer, por lo que el hambre acechaba. Nos dieron una uva pasa a cada uno (aunque a algunos no pudieron resistir sin coger alguna más, a esas horas) Apagaron las luces y nos invitaron a cerrar los ojos.
Primero teníamos que sentir la pasa en nuestra mano. Debíamos centrar toda nuestra atención en la uva. Si escuchábamos algún sonido exterior, había que dejarlo pasar, al igual que con cualquier pensamiento que acudiera a nuestra mente (cosa que es normal que suceda) A continuación nos acercamos la pasa a la nariz para captar todos los matices del aroma que tenía. Luego nos pidieron ir acercando la uva a nuestra boca pero muy lentamente. Entonces había que morder muy sutilmente un pequeño trozo y ahí la gran mayoría no pudimos resistir más y nos la comimos. ¡Jajajaja! Fue divertido y curioso, la verdad.
A partir de entonces, he procurado practicar todo lo que he podido tanto el Mindfulness como la meditación y otras prácticas, que me han ayudado mucho a relajarme y a aprender a estar más tranquila a la hora de tratar momentos de conflicto en casa. Me han servido a tener más perspectiva y a coger distancia entre el comportamiento inadecuado de mis hijos y la reactividad emocional que yo arrastré durante años. Y puedo asegurar que hoy día me encuentro muchísimo mejor, consigo responder emocionalmente antes que reaccionar, me conozco más profundamente, siento un mayor equilibrio interno, más calma y más paz.
PON EN PRÁCTICA TU MINDFULNESS.
Voy a compartiros unas meditaciones que he extraído de varias fuentes, como los libros “Respirad. Mindfulness para padres con hijos adolescentes” y “Tranquilos y atentos como una rana”, ambos de Eline Snel y que os recomiendo tanto leer como escuchar los audios que llevan. Creo que os servirán para tener una primera toma de contacto con vuestra propia capacidad de sentir y ser.
También quiero que conozcáis el siguiente poema de Leo Buscaglia, que se titula “Escucha”. Dice así:
“Cuando te pido que me escuches
y empiezas a aconsejarme,
no haces lo que te pido.
Cuando te pido que me escuches
Y me dices que no debo
Sentirme de esa manera,
Estás pisoteando mi sentimiento.
Cuando te pido que me escuches
Y sientes que debes hacer algo
Para resolver mi problema,
Por raro que parezca,
Estás fallándome.
Todo lo que quiero
es que me escuches,
no que hables, ni actúes: que me oigas”
Os comparto aquí una cita de Osho que me pareció bastante acertada para acabar de profundizar en este maravilloso y necesario mundo del Mindfulness:
“Estar en silencio es el arte más simple del mundo. No es una acción, sino una no acción. Observa, sé como un observador que desde la montaña contempla lo que sucede en el valle. Es cuestión de práctica. Todo lo que necesitas es un poco de paciencia. Los viejos hábitos habrán de perdurar; las ideas seguirán precipitándose. Y tu mente siempre está como si fuera la hora punta, en pleno embotellamiento. Tu cuerpo no está acostumbrado a sentarse en silencio: te moverás y cambiarás de postura. No hay de qué preocuparse. Simplemente, observa que el cuerpo se está moviendo y dando vueltas, que la mente está convulsionada, llena de ideas (consistentes, inconsistentes, fútiles), fantasías, sueños… Quédate en el centro, observando“.
(Osho)
PRÁCTICAS PARA PADRES Y MADRES:
PRÁCTICAS PARA ADOLESCENTES:
Aquí os vuelvo a dejar el enlace de la entrevista a la profesional del Mindfulness Ana Costa. Para que la podáis disfrutar plenamente conscientes. Podéis compartirla si conocéis a alguien que pueda estar necesitando incorporar el Mindfulness en su vida. Ayudar a las personas es lo más gratificante del mundo y es algo muy necesario hoy en día.
Hasta pronto!!
Querida Reyes:
Muy completo y enriquecedor este maravilloso artículo que, sin duda, aporta un gran valor tanto a los padres como a sus hijos adolescentes.
Muchísimas gracias por incluirme en él y por compartir la preciosa charla que mantuvimos. Fue un enorme placer para mí y la disfruté muchísimo. Espero que ayude a tus suscriptores y les aporte pautas valiosas y útiles para mejorar sus vidas y las de sus hijos.
Gracias, de corazón, por tu fantástico trabajo y por aportarle tanto valor al mundo. Muchísimas familias te necesitan y tú haces una labor magnífica y ofreces una ayuda muy importante y necesaria.
Me siento muy honrada de compartir este maravilloso trabajo contigo y de que seas mi amiga.
¡Gracias, Reyes! Un abrazote inmenso, bonita 🙂
Muchas gracias a ti, Ana, por tu disposición, tu ayuda y tu cariño, a la hora de acompañar a las personas a tener una mejor calidad de vida, en este caso a las familias con hijos adolescentes. Tan necesario hoy día para que ellos aprendan también que sí pueden hacer algo para sentirse mejor gracias al Mindfulness y al Coaching. Gracias siempre, amiga!!
Reyes,
Me ha encantado tu entrada sobre Mindfulnes. Muy didáctico, bien expresado y ameno de leer.
Me voy a volver a plantear incorporarlo en mi vida. Ahora más que nunca necesito parar un poco y encontrarme.
Sigue así. Eres genial y me has ayudado y me ayudas mucho.
Besos
Muchas gracias por tus palabras, Gemma!! Siempre es gratificante recibir opiniones positivas al trabajo que uno realiza, aun sabiendo que lo intentamos hacer de la mejor manera posible, con testimonios como el tuyo sabemos que vamos en la dirección correcta. Ya conoces el Mindfulness y los beneficios que te puede aportar en tu vida desde ya. Si necesitas cualquier pauta o consulta, ya sabes dónde me tienes. Un fuerte abrazo!